Santa Cruz: una elección para confirmar los resultados de las PASO
Las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) no dejaron lugar para sorpresas en Santa Cruz. En efecto, la elección se polarizó y terminó por enfrentar sólo a dos fuerzas relevantes: Unión para Vivir Mejor-UPVM (el sello provincial de Cambiemos) y el Frente para la Victoria-FpV. Si bien ambas coaliciones realizaron una interna, los candidatos que vencieron en las mismas no deberían tener dificultades para retener la totalidad de los votos cosechados en las PASO (45,9% y 29,1%, respectivamente).Con estos resultados, UPVM se quedaría con 2 senadores nacionales y 2 diputados nacionales mientras que el FpV obtendría los dos legisladores restantes en juego (1 senador y 1 diputado).
Puesto que las PASO habilitaron internas en cada fuerza, no debe extrañar que las campañas de UPVM y el FpV se hayan concentrado en una crítica recíproca para buscar captar a los electores ‘perdedores’ de las primarias. Sin embargo, parece difícil que UPVM atraiga al electorado peronista ‘perdedor’ de las PASO como que el FpV consiga seducir a los electores radicales derrotados en las internas de UPVM: Gutiérrez y Prades, precandidatos a senadores derrotados en las internas del FpV y de UPVM, respectivamente, no dejaron pasar la oportunidad de marcar con claridad la diferencia entre oficialismo y oposición provincial. Así las cosas, sería extraño que un elector “opositor” votara al oficialismo, y viceversa.
Por un lado, la campaña de UPVM siguió acentuando dos ejes principales: la denuncia de casos de corrupción y el desempeño macroeconómico de la provincia. Eduardo Costa, primer candidato a senador, y Roxana Reyes, primera candidata a diputada, repartieron los roles durante la campaña. De hecho, mientras que Costa pareció apuntalar con mayor énfasis su crítica a la delicada situación económica provincial, Reyes aprovechó a fustigar al FpV luego de que sus diputados desestimaran el pedido de juicio político a la gobernadora Kirchner por incumplimiento de la ley de ética pública (entre otras causales).
El único cambio en la campaña respecto a agosto consistió en la presencia más marcada de funcionarios nacionales. Primero fue el turno de Rogelio Frigerio, Ministro del Interior, a fines de septiembre: junto a Costa y Reyes, anunció la construcción de las represas Néstor Kirchner y Jorge Cépernic, presentándolas como una oportunidad para “generar trabajo de calidad”. Luego, sobre el cierre de la campaña, Juan José Aranguren, Ministro de Energía, se hizo presente en el lugar donde dichas represas serían emplazadas, reeditando así la visita de Frigerio.
Por otro lado, el FpV continuó con su estrategia orientada a nacionalizar la campaña: Ana María Ianni, primera candidata a senadora, aseguró que el Gobierno central busca profundizar la crisis santacruceña, mientras que Juan Vázquez, primer candidato a diputado, denunció a Costa por el “ahogo financiero” provincial. La crítica al líder de UPVM también se enfocó en su desempeño como legislador en el Congreso de la Nación: Ianni subrayó que Costa “votó en contra” de las represas e insistió sobre el hecho de que “no aportó soluciones durante 6 años y tampoco como ahijado político de Macri”.
Un cambio marginal que se pudo observar en la campaña del FpV se vincula al rol de la gobernadora. De hecho, mientras que durante la campaña pre-PASO Alicia Kirchner mantuvo un perfil bajo, a partir de septiembre la mandataria retomó la iniciativa al mostrarse públicamente en varias inauguraciones, anuncios de obras, y reuniones con inversionistas.
En breve, los comicios de octubre determinarán hasta qué punto el oficialismo santacruceño fue capaz de resistir la crítica situación fiscal que aqueja a la provincia y cuánto rédito electoral pudo obtener la oposición local. Más allá de los resultados definitivos, todo parece indicar que UPVM quedará muy bien posicionado de cara a las elecciones de 2019.
*Por Juan Manuel Moyano Larrazábal, Universidad de Buenos Aires. Investigador de Cuadernos Electorales de CIPPEC.