Las elecciones legislativas nacionales en Santiago del Estero
Este domingo, en Santiago del Estero se eligen cuatro diputados nacionales. La provincia posee un total de siete bancas en la Cámara de Diputados y todas ellas pertenecen al gobierno provincial, el Frente Cívico.
Conducido por el presidente provisional del Senado, Gerardo Zamora, el Frente Cívico ha ganado todas las elecciones para gobernador desde 2005 por importantes diferencias; asimismo, posee un amplio predominio en el Congreso nacional, donde además de los siete diputados cuenta con los tres senadores por Santiago.
El inquebrantable peso del oficialismo es una tendencia que se registra en la provincia desde el retorno de la democracia: desde 1983 hasta el 2002 todas las elecciones para gobernador fueron ganadas por el Partido Justicialista conducido por Carlos Juárez; luego de la intervención federal de 2004, el actual oficialismo –compuesto por dirigentes políticos provenientes del radicalismo y del peronismo- ha logrado construir un poder quizás más extendido que el de su predecesor, controlando la mayoría de las intendencias, con excepción de La Banda.
La alianza con el gobierno nacional le permite al Frente Cívico contar con un flujo de recursos importante para sumar apoyos y sostener su control en el territorio provincial. A la vez, resulta fructífera para el kirchnerismo: Santiago suele ser la provincia donde gana por las diferencias más amplias. En las PASO del 9 de agosto pasado, Daniel Scioli obtuvo el 66% de los votos. La lista de diputados del Frente Cívico para la Victoria, sacó el 67,9% de los votos, impulsada por la figura de Zamora, quien se candidatea como legislador al Parlasur por Santiago y cuya imagen positiva supera inclusive a la de su esposa, la gobernadora Claudia Ledesma. De mantenerse los resultados de las primarias, los diputados Mirta Pastoriza, José Herrera, Graciela Navarro y Aída Ruiz, no tendrán dificultades para renovar sus mandatos.
Las otras dos listas en competencia, Cambiemos (liderada por el radical Marcelo Lugones) y la Alianza UNA (encabezada por el intendente de La Banda, Pablo Mirolo) rondaron los 14 puntos en las primarias y parecen estar lejos de poder disputar un lugar en el Congreso nacional.
La campaña electoral se subordinó a la presidencial: las fuerzas santiagueñas “pegaron” su campaña a la de sus candidatos presidenciales; no se plantearon cuestiones locales específicas sino que el eje fue el cambio o la continuidad respecto de las políticas del gobierno nacional.
Por María Victoria López, UBA. Investigadora invitada de Cuadernos Electorales.