Por María Matilde Ollier
Provincia de Buenos Aires ¿escenario cantado?
La elección legislativa en la Provincia de Buenos Aires es la más relevante del país por dos razones. Primero, porque distribuye la mayor cantidad de diputados nacionales (35). Esta vez elige, además, 3 senadores nacionales, 45 diputados y 23 senadores provinciales, 1.097 concejales y 401 consejeros escolares. Segundo, en Buenos Aires se libra la batalla clave entre el oficialismo y la principal fuerza opositora, Unidad Ciudadana. Cambiemos lleva a Esteban Bullrich candidato a senador nacional y a Graciela Ocaña primera candidata a diputada nacional, triunfante en las PASO. Cristina Kirchner, candidata a senadora nacional y victoriosa en las PASO por un exiguo 0,4 %, comanda UC. Para los gobiernos, nacional y provincial, el desafío radica en revertir el resultado electoral de las primarias y derrotar a la ex presidenta en territorio bonaerense.
La polarización ocurrida en las PASO, cuando Cambiemos y UC sumaron 68,4% de los votos, parece haberse profundizado. La candidatura de Cristina Fernández y la campaña del oficialismo encabezada por la gobernadora María Eugenia Vidal, llamando a votar a “su equipo” para darle continuidad al cambio, han acentuado la polarización entre Cambiemos y UC. Ambas campañas convocan al voto útil: para frenar el ajuste (UC) y para evitar el retorno al pasado y fortalecer el cambio (Cambiemos). Estas estrategias han llevado a una merma (según las encuestas) de los caudales electorales de 1País y Cumplir, cuyos candidatos, Sergio Massa y Florencio Randazzo, sacaron juntos 21,2% de votos en las PASO. Algunos de sus electores migran hacia UC y, en mayor medida, a Cambiemos. La izquierda (FIT) mantiene la fidelidad electoral y las encuestas revelan un leve aumento, derivado de las expresiones políticas que no superaron el piso electoral en las PASO. La “nacionalización” de la campaña afectará la composición de los concejos deliberantes (CD) pues el “efecto arrastre” de los candidatos nacionales y la polarización, disminuirán la participación de terceros partidos nacionales y fuerzas locales en los CD, por la dificultad para superar los pisos establecidos por el sistema bonaerense de representación proporcional (cociente).
¿Revertirá el oficialismo el desenlace de las PASO, derrotando a CFK en Buenos Aires? Si bien éste será el dato político más trascendente, otras cuestiones relevantes para la disputa por el poder se dirimen ese día: cantidad de legisladores nacionales que obtendrá cada partido, composición de la legislatura bonaerense y avance del oficialismo en ambas cámaras, eventual fortalecimiento de la gobernadora MEV en caso de una victoria, nueva correlación de fuerzas en las expresiones opositoras mas moderadas (1País y FJC) y la posibilidad del ingreso de diputados del FIT.
El involucramiento de Mauricio Macri y de MEV en la campaña de Cambiemos y la candidatura de CFK a senadora han dado a la elección bonaerense una envergadura que trasciende los límites provinciales, para impactar directamente en la disputa por el liderazgo nacional entre el oficialismo y la principal oposición. Por lo tanto, un triunfo de UC, dará a CFK mayores posibilidades de ser una referencia ineludible en la reorganización del peronismo, arribando al senado de la nación como la figura más notable de la oposición. Si por el contrario, la victoria recae en Cambiemos, el gobierno se fortalecerá y presentará su triunfo como un punto de inflexión en relación al pasado. Según el oficialismo, la victoria significaría el aval de la sociedad al cambio encarnado por MM y MEV, lo que posibilitaría el ingreso definitivo a la argentina post kirchnerista.
*Por María Matilde Ollier, Decana de la Escuela de Política y Gobierno de la UNSAM e Investigadora de Cuadernos Electorales de CIPPEC.
La opinión del autor no refleja necesariamente la posición de todos los miembros de CIPPEC.