Santiago del Estero renueva gobernador y se descuenta la vuelta de Zamora
El próximo domingo, en Santiago del Estero, además de elegirse tres diputados nacionales, tendrán lugar elecciones provinciales. En esta oportunidad se elige gobernador, 40 diputados provinciales, 137 comisionados municipales y dos intendentes. Teniendo en cuenta la realización conjunta de las elecciones nacionales con elecciones provinciales y locales, que despiertan más interés de la ciudadanía y una mayor movilización de las redes políticas locales, es muy posible que se incremente la participación electoral, que en las PASO fue del 74% del padrón electoral.
Se descuenta un amplio triunfo del gobernante Frente Cívico –una coalición de radicales y peronistas- en todos los niveles, el cual permitirá la vuelta a la gobernación de Gerardo Zamora, quien dejó el cargo en 2013, luego de dos mandatos, para convertirse en senador nacional. Sucederá así a su esposa Claudia Zamora, que lidera la lista de diputados nacionales, y logrará ocupar dicha banca, muy posiblemente junto con dos diputados más de su fuerza política. De este modo, seis de los siete diputados nacionales santiagueños seguirían perteneciendo al oficialismo provincial, mientras que una banca está en manos del Frente Renovador.
Lo que está en juego es la magnitud del triunfo del oficialismo provincial, que busca mantener o superar los casi dos tercios de los votos obtenidos en 2013. En segundo plano, está la competencia entre las dos fuerzas opositoras principales que, a diferencia del Frente Cívico, tienen un claro alineamiento nacional: Frente Renovador 1País y Frente Cambiemos. En las PASO, Cambiemos mostró un crecimiento con respecto a las últimas elecciones legislativas nacionales, desplazando del segundo lugar a los aliados locales del massimo. La competencia entre estas fuerzas se dará nuevamente el domingo, ahora en ambos niveles de gobierno, lo que definirá la cantidad de diputados provinciales que cada partido logre obtener. Si se repitiera el resultado de las PASO, por ejemplo Cambiemos podría obtener siete bancas en una Legislatura Provincial donde el partido de gobierno seguiría siendo dominante. Siendo unas elecciones con “resultado cantado” en el caso de la gobernación y los cargos nacionales, las fuerzas opositoras apuestan sobre todo a obtener lugares en la Legislatura.
En cuanto a los cargos municipales, en la mayor parte se darán elecciones competitivas, principalmente entre diferentes candidatos que forman parte del oficialismo provincial, tal como ha sucedido en las elecciones de este nivel desde que gobierna el Frente Cívico. Permitiendo la competencia en el nivel local entre candidatos que en el nivel provincial se referencian en el gobernador, el frente gobernante ha podido contener a dirigentes de distintas extracciones políticas.
Como sucede generalmente, las elecciones provinciales despiertan mayor interés de la ciudadanía y de los políticos santiagueños. Ello se advierte tanto en la configuración de la oferta electoral como en los temas debatidos en la campaña, que, puede decir, se ha “provincializado” o “territorializado”.
Mientras que para la categoría de diputados nacionales se presentaron cinco fuerzas (Frente Cívico, Cambiemos, Frente Renovador 1País, Izquierda por una Opción Socialista y el Partido Popular Cruzada Santiagueña), en la categoría de gobernador y diputados provinciales se presentan diez fuerzas.
Esta configuración de la oferta electoral muestra que los cargos provinciales movilizan los esfuerzos de las fuerzas políticas santiagueñas en mayor medida que los nacionales.
La elección provincial es la que ha ganado más importancia en Santiago del Estero, como se advierte en la centralidad que han adquirido los candidatos provinciales, desplazando el protagonismo de los candidatos a legisladores nacionales durante las PASO. Sin embargo, a diferencia de elecciones legislativas nacionales anteriores, los candidatos que encabezan las listas de legisladores de las principales fuerzas son figuras importantes en la política provincial: la actual gobernadora Claudia Zamora, el intendente de La Banda Pablo Mirolo, por el Frente Renovador 1Pais y por Cambiemos Emilio Rached, intendente de la ciudad de Pinto y ex vicegobernador. Es por ello, que es difícil determinar en qué medida la competencia por los cargos provinciales influirá sobre la competencia nacionalMientras que las principales fuerzas políticas opositoras buscan nacionalizar la elección, el Frente Cívico persiste, y triunfa, en su estrategia de provincializarla.
Los referentes provinciales de Cambiemos tienen ciertas dificultades para nacionalizar la elección, luego del escándalo protagonizado por uno de sus diputados provinciales, quien sustrajo, minutos antes del cierre de la presentación a la Justicia, la carpeta con los datos sobre la lista, a raíz de haber sido eliminado de la misma; razón por la que Macri no apareció con los candidatos de Cambiemos en su visita. En el caso del Frente Renovador 1País, tiene un discurso centrado en los logros de la municipalidad de La Banda y al mismo tiempo se posicionan claramente alineados con el massismo a nivel nacional.
El Frente Cívico tiene un pasado fuertemente alineado con el kirchnerismo, en una provincia donde el mismo ha tenido sus mejores performances electorales. En la actualidad su perfil, ni oficialista ni abiertamente opositor, hace más conveniente presentarse como un partido preocupado principalmente por defender los intereses de la provincia. De ese modo, en una provincia altamente dependiente de los recursos fiscales nacionales, se destaca el trabajo conjunto con el gobierno nacional en cuanto a realización de obras públicas –como en ocasión de la visita del presidente Macri, en la que fue recibido por la gobernadora-, pero mostrándose distante en cuanto a lo político-electoral.
Santiago del Estero constituye un territorio difícil desde la perspectiva de Cambiemos, que sin embargo ha logrado cierto avance electoral, tal como mostraron las últimas PASO. Máxime teniendo en cuenta que sus “aliados naturales” en otras provincias, los radicales, se encuentran en su mayoría dentro del frente gobernante. El gobierno nacional evita la confrontación con el partido político dominante en la provincia, que asimismo dispone de tres senadores y seis diputados nacionales propios, un recurso político invalorable en un Congreso Nacional que Cambiemos no controla.
Sin poner en cuestión la realización de importantes obras de infraestructura que han cambiado el paisaje provincial, gracias a varios años de una inyección de fondos nacionales sin precedentes; los referentes de la oposición se centran principalmente en las críticas a las prioridades de inversión. En una elección altamente provincializada, la campaña gira así principalmente en torno a la continuidad de la gestión del Frente Cívico, que obtendría su cuarto mandato.
*Por Victoria Ortiz de Rozas, Universidad Nacional de General Sarmiento-Conicet. Investigadora de Cuadernos Electorales de CIPPEC.